El clásico generador de alto voltaje como kit de cartón totalmente funcional. Las máquinas Wimshurst, inventadas alrededor de 1880, fueron durante mucho tiempo las únicas fuentes fiables de alto voltaje, ya que eran necesarias, entre otras cosas, para las máquinas de rayos X. Hoy se pueden encontrar, hábilmente restauradas, en museos como el Salón Físico-Matemático del Zwinger de Dresde y algunas en colecciones escolares, donde permiten realizar importantes experimentos sobre cargas eléctricas.
Máquinas electrizantes de diseño similar llegaron a los salones más refinados hace 200 años, donde la sociedad se divertía con experimentos como el "beso eléctrico": el caballero que se atrevía a dar un beso a la dama cargada recibía inmediatamente una descarga.
A pesar de los hasta 70.000 voltios, ni siquiera el contacto involuntario con esta máquina de Wimshurst es peligroso: la capacidad de las dos botellas de Leiden, es decir, los condensadores, es tal que la fuerza de las descargas se mantiene muy por debajo de los límites establecidos por las autoridades. Un placer altamente excitante en el sentido más estricto de la palabra para todos aquellos que siempre han querido ¡dejarse llevar de verdad!
Volumen de suministro:
- Hojas de cartón precortadas e impresas para el montaje: 12 x DIN A4
- Instrucciones de montaje detalladas
- Amplios accesorios como discos rígidos de PVC, tubos de aluminio, trenzas, pinzas, varilla roscada, bolas de madera y mucho más.
Dimensiones de la máquina terminada: aprox. 24 x 19 x 28,5 cm (ancho/alto)