Función y equipamiento
El mapa estelar giratorio sirve para orientarse en el cielo estrellado y para resolver tareas astronómicas complejas. El anverso y el reverso del mapa grande abarcan juntos los hemisferios celestes norte y sur con una extensión de 54° de declinación más allá del ecuador celeste. Están registradas todas las estrellas de la clase de magnitud -1,6 (Sirio) a +6,0, es decir, un total de 2796 estrellas en 88 constelaciones.
El mapa estelar
Consta de una hoja base tricolor, una cubierta giratoria transparente y un puntero giratorio, y ofrece una vista desde abajo de la bóveda celeste imaginada como una esfera.
Esta se representa en proyección azimutal equidistante sobre la superficie plana del papel. Esto se reconoce por la división roja uniforme, es decir, que no aumenta hacia el exterior, de la declinación en el indicador. Como resultado de esta proyección, las constelaciones están claramente marcadas hacia el borde del mapa.
El mapa estelar también contiene cientos de objetos especiales para la observación con binoculares o telescopios refractores, así como una representación realista de la Vía Láctea. Las estrellas se representan como pequeños discos negros en gradaciones continuas según su brillo aparente o visual.
El volumen incluye, entre otras cosas, un manual de instrucciones detallado, un folleto adjunto con la Luna con un mapa detallado y un índice de nombres, un folleto con las estrellas y una tabla planetaria actualizada.
VERSIÓN ITALIANA
La construcción del mapa celeste
El mapa estelar giratorio sirve principalmente para conocer la bóveda celeste en cualquier momento y también para resolver problemas astronómicos complejos. En el reverso del mapa del hemisferio norte se encuentra el del hemisferio sur, ambos hasta el límite de 54° de declinación opuesta, por lo que se superponen ampliamente. Están dibujadas todas las estrellas desde la magnitud -1,6 (Sirio) hasta +5,5, con un total de 2796 estrellas, repartidas en 88 constelaciones.
El mapa celeste
Se divide en tres partes: un dibujo de fondo en tres colores, una lámina giratoria transparente con un eje en el centro y un índice también móvil, que gira alrededor del mismo punto. El mapa representa el aspecto de la bóveda celeste en proyección azimutal equidistante. Este sistema de proyección se reconoce por la equidistancia de los grados en la escala de declinación indicada en rojo en el índice móvil. Debido a este tipo de proyección, las constelaciones cercanas al borde del mapa aparecen deformadas, «estirada» en sentido horizontal.
Las estrellas están representadas por discos negros de tamaño proporcional a su luminosidad aparente. El mapa contiene también algunos cientos de objetos especiales observables con prismáticos o telescopio, así como una reproducción fiel de la Vía Láctea.
Comentario de nuestros expertos:
El gran mapa estelar Sirius tiene una reputación que le precede. Hace más de 30 años no existía ningún mapa estelar giratorio comparable en cuanto a precisión, representación, etc.
Ahora, reeditado, el mapa estelar Sirius está viviendo un Renaissance en los observatorios públicos.
Por supuesto, un mapa algo más pequeño también serviría, pero ¿por qué renunciar a lo mejor?
(Anderl Rodoscheg)
